31 Ago La Kristalnacht británica
Los cuerpos de Paice y Martin. Wikimedia.
En el marco de los sucesos que precedieron al nacimiento del Estado de Israel, es bien conocido el capítulo denominado «Los Sargentos». Estamos aludiendo a Mervin Paice y Clifford Martin, cuando en el mes de julio de 1947 dos sargentos británicos que fueron ahorcados en la ciudad de Netanya por la Organización Militar Nacional -cuyas siglas eran ETZEL- en represalia al ahorcamiento previo de tres de sus miembros por las autoridades británicas que a la sazón dominaban la Tierra de Israel.
El mismo día en que se conoció en la Palestina de entonces el antedicho ahorcamiento, los soldados y policías ingleses asesinaron a cinco ciudadanos judíos que no guardaban relación alguna con lo sucedido. Lo que es menos conocido -salvo para los judíos británicos- es que el ahorcamientos de los antedichos sargentos británicos en la Tierra de Israel desató una violenta ola antijudía en toda Inglaterra cristalizada en manifestaciones públicas de un claro signo antisemita, colocación de explosivos en la cercanía de comercios judíos y fundamentalmente en la rotura de vidrieras de numerosos establecimientos comerciales pertenecientes a judíos así como agresiones a sus propietarios, cementerios judíos fueron profanados, una sinagoga fue totalmente incendiada y en otras sinagogas sus cristales y fachadas fueron considerablemente dañados. De ahí el parangón de todos estos hechos con los trágicos acontecimientos acaecidos en Alemania y Austria en Noviembre de 1938 en la denominada Noche de Cristal, aunque en este último caso los hechos fueron de otro calibre y magnitud.
Retornando a Inglaterra, cabe señalar a título de ejemplo de esta ola antisemita, que en la ciudad de Plymouth situada a 300 Km. de Londres, en la fachada de la sinagoga de la ciudad aparecieron pancartas que decían » cuelguen a los judíos»,» destruyan a los judíos» y en la misma entrada del local perteneciente a un sastre judío se anunció y se colocó un artefacto explosivo a los efectos de atemorizar e impedir el acceso y la presencia de clientes que requerían sus servicios. A su vez en la ciudad de Birmingham, un pancarta señalaba «despierten, hora de vengarse de los judíos, recuerden a Paice y Clifford» (nombre de los soldados británicos ahorcados).
En otro pequeño pueblo británico rotulado Eccles, un oficial británico retirado y ante una asamblea que reunió a 700 personas afirmó «Hitler tuvo razón, Ustedes deberán exterminar todo judío, todo hombre, mujer y niños». Por su incitación al odio y la violencia, fue sancionado con una multa…Un judío cuya comercio fue totalmente destruido por las hordas, en el mismo lugar que estaba ubicada su vidriera destruida colocó por su parte un pancarta en el que decía. ¿Acaso este acto configura el reconocimiento y honor que ustedes confieren a mi hijo que cayó en la Segunda Guerra Mundial defendiendo a esta tierra, a Inglaterra?»
Todo este triste capítulo de la historia inglesa retorna nuevamente al tapete y se torna actual, habida cuenta que aparecerá reseñado en el nuevo Mueso Estatal del Holocausto ubicado en Londres en Westminster al lado del Parlamento británico. Pauta de la dimensión y trascendencia que cobraron estos acontecimientos, es que formarán parte del nuevo museo pese a que se registraron dos años después de finalizada la Segunda Guerra Mundial.
La apertura de este museo está prevista para el año 2024 y se postergó ante prolongadas controversias suscitadas en torno a qué espacios y tópicos debe abordar el Museo. A título de ejemplo, si debe o no este museo abordar a fondo el antisemitismo reinante en Inglaterra o el intento de no pocas personas de negar la barbarie nazi que azotó a Europa. Hay quienes lo respaldan, otros se oponen categóricamente.
En este contexto se alcanzó un logro significativo cuando se resolvió que la política británica adoptada en la época del mandato británico de prohibir el ingreso de sobrevivientes que huían del Holocausto a la Tierra de Israel así como la postura británica reflejada en la política del «Libro Blanco» impidiendo el ingreso de judíos a la Tierra de Israel previo a la época del Holocausto, serán abordados y estudiados por dos organismos: Memoria y Holocausto Británicos y el Centro de Estudios del Holocausto que operarán al lado del Museo. En artículo publicado en el periódico judeobritánico Jewish Chronicle la Curadora del Museo Judith Shendar afirmó que de corresponder, se verterán las críticas pertinentes a la política británica de cada época
El Museo estará dedicado a perpetuar la memoria de seis millones de judíos exterminados en el Holocausto, pero por su signo estatal y en una medida por cierto atinada, abordará igualmente el exterminio de otros colectivos por el nazismo como gitanos, minusválidos, etc.
El columnista Félix Pope del periódico Jewish Chronicle afirmó que si bien hay espacios en la comunidad judeobritánica que se oponen y cuestionan el diseño establecido para el Museo, tanto el Gran Rabino de Inglaterra Efraim Mirvis, así como la organización que reúne a todas las comunidades judías de Inglaterra y el Instituto de Educación del Holocausto respaldan los lineamientos delineados y anunciados
Fuente: Aurora Digital