03 Ene El Holocausto ´de cosecha propia´ de Rumania: 80 años desde la masacre olvidada de Bogdanovka
POR: Matt Lebovic
Gendarmes rumanos y colaboradores locales deportan a los judíos de Bricevas en 1941, con el rabino Dov Beri Yechiel a la cabeza.
En los días finales de 1941, las autoridades rumanas masacraron a 40,000 judíos en un capítulo del genocidio en el que 420,000 judíos fueron asesinados ´a plena luz del día´ con la ayuda de los colaboradores.
Cuando el tifus estalló en un campo de concentración de Rumania hace 80 años, las autoridades en Bogdanovka decidieron asesinar a los 40,000 prisioneros judíos e incendiar el campo.
Llevada a cabo en la Ucrania ocupada por los rumanos por soldados rumanos, la policía regular ucraniana y alemanes étnicos locales, la masacre de Bogdanovka ha sido en gran parte ignorada por los historiadores, junto con el ¨distintivo¨ papel de Rumania en el genocidio de los judíos de Europa.
¨Me avergüenza decir, que no tenía conocimiento de esa atrocidad¨, le dijo Efraim Zuroff, el cazador de nazis en jefe del Centro Simon Wiesenthal, a The Times of Israel, en referencia a Bogdanovka.
¨La cuestión no es que tan espantoso fue, ya que numerosas atrocidades del Holocausto fueron increíblemente horribles, si no que es una cuestión de ´cobertura´, por falta de una mejor palabra¨, dijo Zuroff.
El ejército rumano estuvo detrás de la mayoría de las masacres del Holocausto del país, en contraste con el modelo posterior de los campos de la muerte construidos por los alemanes en la Polonia ocupada. La mayoría de los judíos asesinados por los rumanos procedían de la Ucrania ocupada, a diferencia de la llamada ¨Vieja Rumania¨.
Estudiantes fascistas rumanos trabajando en una fábrica de ladrillos como parte de sus actividades en el campamento de verano, 1924.
Para complicar más la narrativa, algunos judíos rumanos cayeron bajo el control de Hungría después de la ¨Vienna Diktaf¨ de 1940. Esos judíos permanecieron relativamente seguros hasta la primavera de 1944, unos tres años después de que el ejército rumano había ¨limpiado¨ las tierras ocupadas de judíos.
¨En general, los crímenes cometidos por los colaboradores nazis afuera de sus países recibieron menos ´cobertura´ que aquellos cometidos en territorio de origen¨, dijo Zuroff, quien señaló el ejemplo relacionado del Holocausto en Bielorrusia, en el que lituanos, letones y estonios participaron en el asesinato de decenas de miles de judíos locales.
En Rumania, el dictador aliado incondicional de Hitler, el mariscal Ion Antonescu, amplió sus fronteras después de la invasión alemana de la Unión Soviética en 1941. Hitler le dio a Antonescu mano libre para resolver la propia ¨cuestión judía¨ de Rumania, y un estimado de 420,000 judíos bajo el control de Antonescu fueron asesinados relativamente temprano en la guerra.
Antes de la Segunda Guerra Mundial, más de 750,000 judíos vivían en la Gran Rumania. El antisemitismo fue una característica de la vida rumana durante décadas antes del Holocausto, pero el ascenso del fascismo incluyó una virulenta cepa de antisemitismo ¨racial¨. Comenzando en 1940, aproximadamente 32 leyes y 31 decretos fueron aprobados en contra de los judíos de Rumania.
El pogromo de Bucarest del 23 de enero de 1941, iniciado por la Guardia de Hierro de Rumania.
Al igual que los camisas pardas en Alemania, Rumania tenía un grupo paramilitar llamado la Guardia de Hierro, fundado en 1927. También conocido como los Legionarios o Camisas Verdes, la organización prometió derrotar ¨la agresión rabínica contra el mundo cristiano¨.
A continuación de un fallido golpe de estado en enero de 1941, la Guardia de Hierro llevó a cabo un pogromo contra los judíos de Bucarest. Al menos 125 judíos fueron asesinados antes de que Antonescu pusiera fin a la violencia, pero el genocidio de judíos -y de personas romaníes -se aceleró ese verano en las tierras recién adquiridas de Rumania.
¨El pueblo judío ha malversado y empobrecido, especulado e impedido el desarrollo del pueblo rumano durante varios siglos¨, dijo Antonescu. ¨La necesidad de liberarnos de esta plaga es evidente¨.
´Tren de la muerte´ desde Iasi
La primera masacre a gran escala del Holocausto en Rumania tuvo lugar en Iasi, una ciudad universitaria cerca de la frontera con Moldavia, en junio de 1941.
Judíos arrestados durante el pogromo de Iasi en Rumania, junio de 1941.
Alentados por Antonescu, los soldados rumanos se asociaron con la policía y turbas locales para asesinar a 12,266 judíos, los residentes de Iasi ayudaron a arrestar a los judíos y saquearon sus casas, así como a humillar a los judíos que marchaban fuera de la ciudad.
Al igual que en Bucarest, la Guardia de Hierro lideró turbas para asesinar a los judíos en las calles y en sus casas, desplegando palas y cuchillos, además de pistolas. Después de la masacre inicial, 5,000 judíos fueron metidos en vagones para un viaje en ¨tren de la muerte¨ en el que 4,000 de ellos perecieron.
En contraste con el Holocausto en Alemania, no hubo ¨operaciones encubiertas¨ en Rumania. El genocidio fue ejecutado ¨a plena luz del día¨ bajo la dirección de las autoridades rumanas. Falsos artículos de prensa sobre que los judíos les hacían señales a los aviones Aliados, ayudaron a ¨justificar¨ las masacres y a incitar a los colaboradores, pero esas historias no tenían la intención de engañar a los judíos.
¨Las masacres fueron en gran parte descoordinadas, y aunque la crueldad con la que el ejército rumano masacró a los judíos ucranianos y rumanos ganó la aprobación de Hitler, sin embargo, se ganaron el desdén de muchos oficiales de las SS, que menospreciaban las técnicas primitivas empleadas por los rumanos¨, escribió el historiador Christopher J. Kshyk.
Médicos militares rumanos examinan a judíos en el ´tren de la muerte´ de Iasi en 1941.
Por primitivos que parecieran los métodos rumanos, el ejército del país, la fuerza policial, y los colaboradores civiles establecieron un ¨modelo¨ para las masacres del Holocausto en otros lugares, incluida Kiev.
La masacre de septiembre de 1941 de 33,771 judíos en Babyn Yar, un barranco en Kiev, fue catalizada similarmente por informes de prensa falsos sobre sabotaje judío. En el sitio de la masacre, las unidades alemanas ¨Einsatzgruppen¨ de las SS se asociaron con los ucranianos, haciéndose eco del uso de colaboradores locales por parte del ejército rumano a principios de ese verano.
Cinco meses después del pogromo de Iasi, el Holocausto en Rumania alcanzaría un clímax frenético -pero en gran parte olvidado -en el campo de concentración de Bogdanovka.
´Tren de la muerte´ enviado por las autoridades rumanas con 5,000 judíos desde Iasi.
´Con sus propias manos´
Localizado en la Ucrania de hoy, Bogdanovka era una serie de campos -llamados ¨colonias¨ en rumano -establecidos cerca de una ex granja colectiva judía en el río Bug Meridional. Para noviembre de 1941, el campo albergaba a 54,000 judíos de la Odesa controlada por los rumanos y la región Bessarabia de Moldavia.
En diciembre de 1941, se reportaron unos pocos casos de tifus en Bogdanovka. En respuesta, el asesor alemán del distrito y los administradores rumanos decidieron asesinar a 40,000 de los prisioneros e incendiar las instalaciones.
Comenzando el 21 de diciembre, los soldados y colaboradores rumanos -incluidos los alemanes de etnia local bajo el mando de la policía ucraniana -forzaron a entrar a miles de judíos discapacitados y ancianos en dos establos cerrados con llave. Las estructuras fueron rociadas con queroseno y les prendieron fuego, matando a todos adentro.
El lugar de la masacre de Bogdanovka en la Ucrania de hoy, bajo control rumano durante el Holocausto.
Después del infierno, los perpetradores llevaron a grupos de 300 a 400 judíos al bosque donde fueron disparados en la nuca en un sitio que los soldados rumanos llamaban ¨el gran valle¨.
La tecnología de los campos de extermino alemanes aún estaba a meses de funcionar, así que los soldados rumanos observaron a miles de judíos congelarse hasta la muerte a lo largo de la orilla del río durante los días finales de 1941.
¨Al resto [de los judíos de Bogdanovka] los dejaron afuera congelándose en el frío, esperando en los bancos del rio su turno para morir¨, según Yad Vashem. ¨Con sus manos desnudas cavaron hoyos en el suelo, llenándolos con cadáveres congelados y tratando de esta manera de cobijarse del frío. Sin embargo, miles de ellos se congelaron hasta la muerte¨.
Judíos en la orilla occidental del río Dniestr antes de la deportación a Transnistria.
Haciendo una pausa por Navidad, la masacre se reanudó tres días después. Entre el 21 de diciembre y el último día de 1941, al menos 40,000 judíos fueron asesinados en Bogdanovka.
´Un capítulo distinto´
Durante la segunda mitad de 1941, Antonescu logró superar a la Alemania nazi en el genocidio de los judíos de Europa.
¨Las políticas de limpieza étnica de Antonescu fueron llevadas a cabo independientemente, pero con la aprobación, del Tercer Reich de Hitler, haciendo la persecución de los judíos de Rumania un capítulo distinto en la historia del Holocausto¨, escribió el historiador Kshyk.
En el otoño de 1941, Antonescu acordó tentativamente deportar al resto de los judíos de Rumania a los campos de exterminio, pero esos planes fueron cancelados en 1942. Parcialmente por razones económicas, Antonescu decidió prescindir de unos 290,000 judíos en la ¨Vieja Rumania¨ y casi facilitó la emigración de 5,000 judíos a Palestina por una tarifa elevada.
Tropas alemanas marchan en Bucarest, Rumanai, el 27 de diciembre de 1940.
Al revertir el genocidio de los judíos bajo su control, Antonescu estaba mirando hacia la posición negociadora de Rumania en una conferencia de paz posguerra. Ya en la primavera de 1942, el astuto dictador se dio cuenta de que Alemania perdería la guerra. Después de que las fuerzas soviéticas entraron en Rumania en 1944, Antonescu fue arrestado y, dos años después, ejecutado en las afueras de Bucarest.
Aunque un gran número de colaboradores nazis de Rumania fueron juzgados y castigados en el período inmediato de posguerra, muchos perpetradores del Holocausto lograron escapar de la justicia. Hasta la fecha, dijo Zuroff, sólo cuatro personas han sido condenadas por participar en las atrocidades del Holocausto en la Europa oriental poscomunista, y sólo dos de las cuatro fueron castigadas.
¨Recibimos información potencialmente valiosa en al menos uno de los casos de una persona que presuntamente participó en el asesinato masivo de judíos en Odesa¨, dijo Zuroff, refiriéndose al esfuerzo de la ¨Operación Última Oportunidad¨ del Centro Simon Wiesenthal para llevar a los perpetradores del Holocausto ante la justicia.
¨Desafortunadamente, murió antes de que pudiera ser juzgado¨, dijo Zuroff.
Ejecución del dictador rumano, Ion Antonescu, en las afueras de Bucarest.
Un monumento vandalizado para las víctimas del Holocausto en Bogdanovka, Ucrania, 15 de septiembre del 2020.
En el 2003, el gobierno de Rumania reconoció el papel del país en el genocidio. Sin embargo, ha habido un ¨retroceso¨ en ese reconocimiento y tensiones sobre el naciente museo del Holocausto de Bucarest. Un memorial de Bogdanovka ha sido vandalizado varias veces en años recientes.
¨En lo que se refiere a la negación y distorsión del Holocausto, Rumania ha tenido una gran parte de ambos, como es típico en todas las ´nuevas democracias´ poscomunista de Europa Oriental¨, dijo Zuroff.
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil