27 Jun Un judío que hizo historia

Ernst Lubitsch nació en Berlín, Alemania, el 20 de enero de 1892.

A la izq. Greta Garbo, a la der. Jennifer Jones. Foto: Wikipedia – Dominio Público

 Dado el ambiente antisemita existente en su época en toda Europa, pero esencialmente en los círculos artísticos e intelectuales de Alemania y Austria, en 1922 decidió partir hacia Estados Unidos, siendo el primero de una ola de actores y directores de cine y teatro que partieron hacia Hollywood y Broadway.

En su juventud, como actor, director o productor, hizo 55 películas en Alemania, mientras que ya en Estados Unidos hizo más de 30. Dirigió y produjo dramas, románticas, pero en lo mejor de su carrera se destacó por musicales y especialmente comedias.

Era el tipo de director que no permitía cambios ni personalismos, sus obras fueron bautizadas posteriormente de “estilo Lubitsch”.

Entre sus mejores películas destacamos: “Ninotchka” (1939), gran sátira al comunismo de la Unión Soviética, y primera película donde la gran Greta Garbo se ríe, pues a su fama de gran actriz y gran belleza se unía el hecho de que jamás sonreía en una película. Otra gran obra fue “Ser o no Ser” (1942), también gran sátira, esta vez al nazismo, en la que actuó Carole Lombard muerta en un accidente de aviación antes de que se estrenara, y se completa la trilogía con “El pecado de Cluny Brown”, con Jennifer Jones y Charles Boyer, en la que satiriza sobre la alta sociedad británica.

Ernst Lubitsch. Foto: Wikipedia – Dominio Público

En 1932 dirige “Remordimiento” (The broken lullaby), un drama sobre la postguerra que trata la historia de un francés que, en la primera guerra mundial, asesina a un soldado alemán, con Lionel Barrymore y Nancy Carroll.

Además de su trabajo cinematográfico, como judío tuvo mejor oportunidad. En 1938 Lubitsch fue nombrado representante del cine europeo en Hollywood como presidente del Fondo Europeo de Cine recién fundado, que apoyaba a los cineastas europeos necesitados que habían emigrado a los Estados Unidos. Ocupó este cargo hasta su muerte en 1947. De esa forma pudo ayudar a muchos europeos, judíos y no judíos, que escapaban del nazismo y de la segunda guerra mundial.

El cine alemán sufrió un gran éxodo, mayormente hacia Hollywood, por la crisis económica y sobre todo por el surgimiento del nazismo. Actores, directores, técnicos, pasaron a engrosar las filas de los estudios de Hollywood, y a levantar el nivel técnico de las películas, influyendo mucho en un cambio de estilos y de técnicas. Entre ellos podemos nombrar a Fritz Lang, Billy Wilder, Marlene Dietrich, Otto Preminger, Emil Jannings, Luise Rainer, Robert Siodmak, Fred Zinnemann, Edgar Ulmer, Friedrich Murnau, y tantos otros.

Fuente: Aurora Digital