13 Ene Cuatro juguetes famosos que fueron inventados por judíos
Las experiencias que tenemos en la infancia son momentos que nos impactan para el resto de nuestras vidas, los lugares que recordamos, las formas de actuar, las personas con las que convivimos y por supuesto las actividades que hicimos todas son influyen en cómo nos relacionamos hoy con el mundo; y los juguetes que escogemos son parte de ello. Los siguientes son la historia de cuatro juguetes famosos que fueron inventados por judíos.
Ruth Handler y la Barbie
Desde los años 60 hasta la fecha la compañía de Mattel ha sido una de las más exitosas que existen en el mundo, quien no creció con un muñeco de plástico, un Lego o juego de mesa hecho por ellos. De entre todas sus producciones la Barbie fue desde el inicio su estrella, rápidamente se convirtió en el ícono de las niñas cuando buscaban una figura atractiva y fuerte para jugar con ella. Todo empezó a finales de la década de los 40 tras la Segunda Guerra Mundial, la familia Handler se había unido con Harold Matson para formar Mattel y juntos producían marcos de madera y plásticos para fotos.
Ruth (hija de inmigrantes judeo-polacos) se dio cuenta que con las sobras podían producir juguetes y accesorios para muñecas, éstos pronto se vendieron con mucha mayor facilidad y frecuencia que los mismos marcos; por lo cual la compañía entera cambio su giro de ventas y para 1955 ya era tan exitosa que podía promocionar sus propios programas y comerciales. Uno de los grandes cambios mercadotécnicos que Ruth hizo dentro de la empresa y revolucionó por completo la industria es que empezó a vender y promocionar sus productos a los niños antes que a los padres. Los shows, comerciales y estrategias estaban dirigidos a los niños.
Con la Barbie precisamente se dio cuenta que las niñas ya no deseaban crecer para ser únicamente amas de casa y su objetivo fue crear una muñeca que fortaleciera ese deseo de independencia. La Barbie se pinto desde un inicio como el rol de una mujer independiente y a la moda, también fue de las primeras muñecas en el mercado en tener una figura estilizada, razón por la cual algunos padres no lo veían con buenos ojos para sus hijas. La muñeca salió a la luz en 1959 y desde un inicio la estrategia de ventas fueron los accesorios, la muñeca misma se daba a un precio bastante accesible y se vendía su ropa, la casa, los muebles y demás.
Oso de peluche. Morris Mitchom
Desde épocas inmemorables han existido juguetes suaves para acompañar a niños pequeños en sus juegos. Muy probablemente las primeras hayan sido las muñecas de trapo. Sin embargo, la industrialización de los peluches y su difusión masiva en gran medida se lo debemos al osos “Teddy” que fue creado por Morris Mitchom y Margaret Steiff. Antes de ello no era común crear animales con relleno para comercializarlos y hasta la fecha el oso de peluche sigue siendo un ícono y de los juguetes más vendidos.
Todo empezó con un caricaturista que dibujo a Theodore Roosvelt junto a un oso en 1902. Retrataba un viaje de caza en el cual el presidente se había negado a matar a un oso. Esa caricatura pronto se popularizo y empezó a asocairse al presidente con los osos. Morris Mitchom quien tenía una tienda de dulces con su esposa vio la popularidad que tenía el dibujo y decidió hacer un muñeco de peluche que asemejará al oso, le puso el nombre del presidente Teddy (Theodore) Bear. Los peluches tuvieron un enorme éxito y pronto se vendieron masivamente.
Por la misma fecha una costurera alemana Margaret Steiff había empezado a producir elefantes rellenos, cuando un americano vio su trabajo le pidió que produjera osos para importarlos a Estados Unidos. A estos osos también se les puso el nombre de Teddy y pronto hubo un enlace entre los productores estadounidenses y los alemanes, haciendo al oso Teddy una especie de ícono en ambos países.
Señor Cara de Papa. George Lerner
Desde tiempos inmemorables los niños han usado vegetales para jugar con ellos, desde ver formas raras, hacer esculturas o simplemente dibujarlos es normal que muchos niños experimenten diariamente con ellos. Este era el caso de George Lerner cuando era niño, el solía tomar las hortalizas del jardín y dibujarle caras para poder jugar con su hermana pequeña. En 1949 se le ocurrió comercializar la idea y crear figuras de plástico, como sombreros, sonrisas, ojos, que pudieran encajarse en distintos vegetales y les dieran una nueva personalidad.
Lo innovador del juguete era la expresividad de los accesorios, la facilidad con la que se propulsaba la imaginación de los niños al buscar formas divertidas en los vegetales. Sin embargo, muchos padres tras haber vivido el racionamiento de la Segunda Guerra Mundial no se sentían cómodos viendo a sus hijos jugar con comida.
Aún así Lerner siguió intentando comercializar su producto, éste realmente despegó cuando los hermanos Hanssfeld (creadores y dueños de la compañía Hasbro) pusieron su ojo en él y decidieron comprar los derechos a la compañía de cereales que los tenía. Lerner hizo nuevos diseños y el juguete salió a la venta en 1952, en menos de un año ya había rebasado el millón de ventas.
Adivina Quién. Theo y Ora Coster
El juego es una de las actividades más importantes que tenemos al crecer, según lo demuestran varios estudios es uno de los propulsores principales del aprendizaje. Esto naturalmente ha llevado a que los adultos inventemos juegos que ayudan a los niños a aprender ciertos contenidos, desde el juego del siete o las canciones de las tablas hasta el Maratón siempre han existido formas lúdicas de fomentar el conocimiento.
Theora Designs es una de las compañías que más juegos educativos a producido en el mundo es la creación de Theo y Ora Coster y a ellos se le deben muchos de los juegos más famosos que conocemos como Adivina Quién. Su compañía empezó cuando Ora hizo un juego con mapas para enseñarle a su hijo las ciudades de Israel y un amigo suyo que tenía gasolineras decidió producirlo y ofrecerlo gratuitamente a sus clientes. Después de ello los esposos crearon Matat una compañía que producía juegos interactivos y que más adelante se convertiría en Theora Design.
Fuente: Enlace Judío