20 Oct Confirmando las peores atrocidades de Hamás: dentro del Centro de Identificación de Muertos de Israel

En el centro del Rabinato para la identificación de los muertos en Israel, la evidencia de la extrema crueldad perpetrada por los terroristas de Hamás es insoportable incluso para personas acostumbradas a la muerte – incluida la confirmación de la descripción del primer ministro Benjamín Netanyahu sobre los bebés decapitados.

Por Ido Efrati

El centro de identificación de muertos en la base militar Shura cerca de Ramle. Foto: Naama Grynbaum

Lo primero que te golpea al entrar en el centro de identificación de muertos junto a Ramle es el insoportable hedor a muerte. Ninguna máscara puede protegerte de ello. La base militar de Shura – que en circunstancias normales es el campamento principal del Rabinato del ejército israelí – se ha convertido en un punto final. Es una horrible cuenca de drenaje en la que desemboca el terrible río de los muertos, hasta que los difuntos son enviados a su descanso final.

El viernes, casi una semana después de que estalló la guerra, a miembros de los medios de comunicación israelíes e internacionales se les permitió ingresar a la base para mostrar al mundo algunos de los horrores llevados a cabo por Hamás en las comunidades cercanas a Gaza. El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel pretende revelar lo que hicieron los asesinos, pero al mismo tiempo instó a evitar detalles que pudieran convertirse en pornografía de la muerte.

Un espacio de almacenamiento donde se encuentran algunos de los fallecidos a la espera de su identificación. Foto: Naama Grynbaum

Según las personas involucradas en el manejo de los cuerpos, la descripción que hace el primer ministro Benjamín Netanyahu de los bebés decapitados es precisa.

Las imágenes son difíciles de captar. Los sentimientos en este lugar, al que cada vez son llevados más cuerpos, son imposibles de expresar con palabras. El trabajo de identificación de los muertos es metódico, como en una cadena de montaje.

En el lugar hay una larga fila de 13 contenedores. Cada uno contiene 44 cuerpos y partes de cuerpos cuya identificación se ha completado.

Se abre la puerta de uno de los contenedores para nosotros, para tomar fotografías. Recibimos explicaciones. Los trabajadores han estado aquí las 24 horas del día desde el 7 de octubre. Muchos son voluntarios de la organización ultra ortodoxa Zaka (que recupera cuerpos y partes de cuerpos después de ataques terroristas). Algunos pertenecen a la Unidad 360, una organización nacional relativamente nueva que también se dedica a identificar a las víctimas. Otros son empleados civiles del ejército, mientras que hay otros también – personas acostumbradas a tratar con los muertos a diario, identificar a las víctimas de desastres y preservar su dignidad.

Algunos de los trabajadores del lugar, donde el hedor a muerte es insoportable. Foto: Naama Grynbaum

En el borde del recinto hay un camión frigorífico que contiene cadáveres que han sido identificados y liberados para su entierro. Se está cargando. El proceso es largo. Cientos de familias ya tienen muertos que enterrar y otras aún no han recibido información verificada sobre sus seres queridos. Nunca antes Israel había puesto en marcha un proyecto para abordar e identificar a las víctimas en un día.

Los trabajadores usan guantes, máscaras y ropa protectora. Parecen agotados, desde todas las perspectivas. La turba de periodistas parece haber irrumpido en su mundo. Ninguno se acercó fácilmente a hablar con nosotros y contarnos lo que habían visto.

“Estoy aquí desde el domingo”, dice Haim Oter, voluntario de Zaka. “Los que están aquí” – en ese contenedor – “son sólo los que han sido identificados. He estado descargando y cargando cadáveres toda la semana”.

Un camión frigorífico en el centro. Foto: Naama Grynbaum

¿Cómo lo soporta? “No es nuevo para mí”, responde Oter. “Rutinariamente soy voluntario en la Chevra kadisha [sociedad funeraria] en el lavado de cuerpos”.

Benny Schechter, también voluntario de Zaka, llegó el día anterior desde los Altos del Golán. «Algunos de los cuerpos se encuentran en muy mal estado», afirma. “No los mataron simplemente a tiros. Algunos son muy difíciles de identificar porque fueron quemados. En algunos casos, el cuerpo y la cabeza se encuentran por separado. Se encontraron partes de cuerpos en los árboles. Es una crueldad que es muy difícil de describir. Le dije a la familia que me quedaría aquí todo el Sabbat para seguir trabajando”.

Shlomit Landes, jefe de la unidad de investigaciones de la policía de Israel, dirige actualmente este complejo. Allí también hay cientos de policías trabajando las 24 horas del día, afirma. «Algunos de ellos nunca antes habían trabajado con cadáveres», dice. «Muchos de ellos no pueden soportarlo».

Un vehículo Zaka en el centro de identificación. Foto: Naama Grynbaum

El mundo entero necesita entender que las descripciones expresadas una y otra vez por los líderes de Israel no son exageradas, dice a los periodistas extranjeros el teniente coronel Richard Hecht, portavoz internacional de las Fuerzas de Defensa de Israel. Esto es lo mismo que ISIS.

“Pasamos tres días con los [medios internacionales], para que entiendan el alcance de la masacre que ocurrió aquí – porque a partir [del domingo] comenzarán a acusarnos de ser criminales de guerra”, dice. “Las FDI sólo apuntan a Hamás, no a la población civil. No atacamos a los niños. Hamás los utiliza como escudos humanos. Todos los soldados de las FDI también deberían visitar este lugar para comprender lo que está pasando aquí y lo que pasó”.

Trabajadores en el centro de identificación. Foto: Naama Grynbaum

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: Haaretz
https://www.haaretz.com/israel-news/2023-10-15/ty-article-magazine/confirming-the-worst-hamas-atrocities-where-israel-identifies-the-dead/0000018b-3313-dff1-a5eb-ffffee6f0000?utm_source=App_Share&utm_medium=iOS_Native