02 Ago El ministro de Justicia, Yariv Levin, quiere una guerra civil, según un alto cargo del Likud
El ministro de Justicia, Yariv Levin, en un mitin en apoyo de la revisión judicial prevista por el gobierno, frente a la Knesset, el parlamento israelí en Jerusalem, el 27 de abril de 2023.
El funcionario anónimo dijo que hay un «gran grupo en el Likud que se opone a Levin», más de lo que se ha manifestado públicamente.
POR: TROY O. FRITZHAND
«Yariv Levin quiere una guerra civil», según un alto cargo del Likud. El miembro habló bajo condición de anonimato cuando la Knesset comenzó su receso de dos meses y medio a principios de esta semana.
Levin, ministro de Justicia, es el artífice de las polémicas reformas judiciales de la coalición de gobierno. La legislación, cuyo primer aspecto se aprobó la semana pasada en forma de «Ley de anulación de la cláusula de razonabilidad», desencadenó meses de intensa agitación social y política, con más de 100.000 israelíes protestando semanalmente en todo el país contra la reforma.
Aunque muchos de los detractores de la legislación se han mostrado abiertos a algún tipo de cambio en el funcionamiento del sistema judicial del país, en particular en la forma en que se forma la judicatura y en la Cláusula de Razonabilidad, ha habido poca simpatía por el proceso relativamente precipitado al que se ha sometido la ley.
De ello se han hecho eco públicamente miembros de la coalición gobernante, entre ellos parlamentarios del Likud como Yuli Edelstein, David Bitan y Eli Dallal.
Edelstein habló con el programa Meet the Press del Canal 12 el pasado sábado por la noche y les dijo que había presionado para que se celebraran conversaciones desde que Levin propuso por primera vez la reforma en enero.
El primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Justicia Yariv Levin en una reunión del gabinete del gobierno en Jerusalem, el 2 de abril de 2023.
Lamentó haberse «dormido un poco» en su defensa, arremetiendo contra ambas partes por su incapacidad para llegar a un acuerdo serio en la Residencia del Presidente.
La nueva realidad de Israel y el creciente cisma en la política israelí
«Cada vez que hay una propuesta de compromiso, alguien la veta, ya basta», dijo Edelstein al Canal 12. «A partir de ahora tendrán que explicar de la A a la Z qué se va a votar, cuándo se hace avanzar y con qué fórmula. Esta es la nueva realidad, y esta es mi lección. Si no, parece que tendrán que arreglárselas sin mí».
Dallal escribió la semana pasada en Twitter tras el ayuno de Tisha B’Av, día de luto nacional por la destrucción del Primer y Segundo Templos de Jerusalén, así como por otras calamidades que sufrió el pueblo judío a lo largo de la historia, que «anuncio que sólo apoyaré las medidas que se logren mediante un amplio consenso nacional».
El alto cargo del Likud se hizo eco de este punto, subrayando que hay un «gran grupo en el Likud que se opone a Levin», más de lo que se ha manifestado públicamente. Incluso llegó a decir que las acciones de Levin están «destruyendo el Estado de Israel».
El ministro de Justicia había sido considerado favorito en la hipotética carrera para sustituir al primer ministro Benjamin Netanyahu cuando éste decida retirarse en el futuro. Esta confusión crea un cisma en el Likud, sobre todo porque Levin tendría que conseguir algún día una mayoría de apoyo dentro de su partido si quisiera siquiera el primer puesto de su lista electoral, por no hablar de llegar a la Oficina del Primer Ministro.
El alto funcionario subrayó que, hoy en día, aunque la Knesset no volverá a reunirse para debatir legislación hasta después de las Altas Fiestas judías, a mediados de octubre, «Levin no tiene la mayoría para aprobar las próximas leyes que quiere aprobar».
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post
