25 Abr Un Israel profundamente dividido cojea hacia su 75to aniversario bajo el peso de una ruptura interna
Israelíes protestan contra los planes del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para reformar el sistema judicial, en Tel Aviv, 9 de marzo del 2023.
La reforma judicial planeada por el gobierno ha dividido a la nación tan profundamente que la división se siente algunas veces incluso dentro de las familias.
POR: Josef Federman
AP.- Orit Pinhasov se opone fuertemente a la reforma judicial propuesta por el gobierno israelí, pero no la encontrarán en ningún lugar cerca de las protestas contra el plan. Dice que su matrimonio depende de eso.
El esposo de Pinhasov se sienta en el lado opuesto de la división política de Israel, y unirse a las protestas solo profundizará lo que, según ella, ya son tensiones palpables en su hogar.
¨No quiero ir a las manifestaciones no porque no crea en ellas¨, dijo. ¨No voy para proteger mi hogar. Siento como estoy luchando por mi hogar¨.
Mientras Israel cumple 75 años el miércoles, tiene mucho que celebrar. Pero, en lugar, de festejar sus logros como una potencia militar y económica regional, la nación que surgió de las cenizas del Holocausto enfrenta quizás su amenaza existencial más grave hasta ahora – no de enemigos extranjeros sino de divisiones internas.
Durante más de tres meses, decenas de miles de personas se han manifestado en las calles en contra de lo que ven como una agresión por parte de un gobierno ultranacionalista religioso que amenaza una identidad nacional enraizada en tradiciones liberales.
Los pilotos de combate en las reservas de voluntarios han amenazado con dejar de presentarse al servicio. Los líderes de la nación han advertido abiertamente sobre una guerra civil, y familias de soldados caídos han pedido a los políticos que se mantengan alejados de las ceremonias conmemorativas. Muchos israelíes se preguntan si la profunda división podrá sanar alguna vez.
Decenas de miles de israelíes protestan contra los planes del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para reformar el sistema judicial, Tel Aviv, 15 de abril del 2023.
Miri Regev, la ministra del gobierno a cargo de la celebración principal el martes en la noche, ha amenazado con echar a cualquiera que la interrumpa. El evento tiene lugar en una plaza junto al cementerio nacional de Israel en Jerusalem, donde el país cambia abruptamente de las solemnes ceremonias del Día de Recordación por los soldados caídos a la alegría del Día de la Independencia, completada con una ceremonia simbólica de encendido de antorchas, marchas militares y música y espectáculos de danza.
El líder de la oposición, Yair Lapid, está boicoteando la ceremonia. ¨Han desgarrado a la sociedad israelí, y ningún espectáculo falso de fuegos artificiales puede encubrir eso¨, dijo.
La brecha es tan amplia que el problema más antiguo y quizás más apremiante de Israel -su conflicto con los palestinos – apenas se menciona a pesar de un reciente aumento de la violencia.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, un líder polarizador reverenciado por sus seguidores y vilipendiado por sus opositores, ha desempeñado un papel clave en la crisis. Las divisiones ganaron fuerza cuando fue acusado de cargos de corrupción en el 2019. Israel superó cinco ciclos de elecciones en menos de cuatro años -todos ellos enfocados en la aptitud de Netanyahu para gobernar.
A fines del año pasado, Netanyahu finalmente logró una victoria -improvisando el gobierno más derechista en la historia de Israel. En cuestión de días, se dispuso a reformar el sistema judicial y dar a los aliados de Netanyahu el poder de anular las decisiones de la corte y nombrar a los jueces.
Israelíes de derecha marchan con la Torah en una manifestación en apoyo a los planes del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para reformar el sistema judicial, en Tel Aviv, Israel, 18 de marzo del 2023.
El plan, que los críticos ven como una toma de poder transparente, ha desencadenado protestas sin precedentes que, en última instancia, forzaron a Netanyahu a suspenderla temporalmente. En un reflejo de la profunda desconfianza, las protestas sólo se han hecho más grandes, exponiendo fallas más profundas en la sociedad israelí que se remontan a décadas atrás.
Del lado de Netanyahu está una coalición religiosa y socialmente conservadora que incluye a la minoría ultraortodoxa políticamente poderosa, la comunidad nacionalista religiosa, los colonos de Judea y Samaria, y los judíos de ascendencia del Medio Oriente que viven en las afueras de las ciudades de clase trabajadora.
Los que protestan contra él son en gran parte profesionales seculares de clase media detrás de la economía moderna de Israel. Incluye a trabajadores de alta tecnología, profesores, abogados y comandantes actuales y anteriores de las fuerzas de seguridad de Israel.
La minoría árabe de Israel, mientras tanto, se ha mantenido al margen de las protestas en gran medida, diciendo que, para comenzar, nunca se sintieron parte del país.
Estas divisiones se han filtrado a los lugares de trabajo, las amistades y las familias.
A pesar de las diferencias políticas, Pinhasov, de 49 años, dijo que ella y su esposo han ¨vivido en paz¨ durante 30 años. Dijo que había desacuerdos en la época de elecciones cada pocos años, pero estos fueron de corta duración y menores.
Eso comenzó a cambiar durante la pandemia de coronavirus, cuando Pinhasov dijo que el tono del debate público sobre temas como los cierres y las vacunas se volvió más estridente. Luego, mientras Israel rebotaba de elección en elección, las tensiones comenzaron a sentirse en casa.
Su esposo le decía que le habían ¨lavado el cerebro¨ y se quejaba sobre los medios de comunicación ¨izquierdistas¨, dijo Pinhasov. Cuando ella no estaba de acuerdo, decía, ¨tú no entiendes¨. No podían ya ver las noticias juntos o ¨Wonderful Country¨, un popular programa de sátira política.
Sus cuatro hijos, incluido uno de 21 años que comparte las opiniones de su padre, todos se aman y se respetan entre sí y a sus padres, dice. Pero es complicado, como ¨caminar sobre cáscaras de huevo¨.
Si bien Israel generalmente se une en tiempos de guerra, las semillas de la desconfianza fueron plantadas hace décadas.
Desde los primeros días del país, la mayoría judía estuvo plagada de desacuerdos sobre temas como si aceptar reparaciones de la Alemania Occidental posguerra, violentas protestas por los judíos más pobres de Medio Oriente a principios de los años 1970, y amargas divisiones internas sobre los fiascos militares durante la guerra de Medio Oriente de 1973 y más tarde en Líbano.
Israelíes protestan contra los planes del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para reformar el sistema judicial, en Tel Aviv, 9 de marzo del 2023.
El primer ministro Yitzhak Rabin fue asesinado por un ultranacionalista judío en 1995 que se oponía a los esfuerzos de paz con los palestinos. Grandes protestas estallaron cuando Israel se retiró de la Franja de Gaza en el 2005.
¨Israel siempre fue una sociedad profundamente dividida, pero de alguna manera se mantenía unida¨, dijo Tom Segev, un autor, historiador y periodista israelí. ¨La diferencia ahora es que realmente estamos discutiendo los valores básicos de esta sociedad¨.
Las protestas contra el gobierno de Netanyahu muestran que muchos están ¨genuinamente asustados¨ por el futuro del país, dijo.
El economista de la Universidad de Tel Aviv, Dan Ben-David, presidente de la Institución Shoresh para la Investigación Socioeconómica, señala dos eventos fundamentales en la historia de Israel -las guerras de Medio Oriente de 1967 y 1973.
La guerra de 1967, en la cual Israel capturó Judea y Samaria, la Franja de Gaza y Jerusalem del Este, generó el movimiento de los colonos judíos, que se ha convertido en una poderosa fuerza política representando a unas 700,000 personas.
Mientras tanto, la guerra de 1973, desencadenó un proceso que traería al partido derechista Likud al poder cuatro años después. El Likud ha gobernado la mayor parte del tiempo desde entonces, usualmente en sociedad con los partidos ultraortodoxos.
Estos partidos religiosos han usado su poder político para ganar generosos subsidios y controvertidas exenciones del servicio militar – enfureciendo al público secular en general.
Un manifestante ondea la bandera israelí sentado y flanqueado por la policía de frontera paramilitar durante una protesta contra los planes del gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para reformar el sistema judicial, en Tel Aviv, 9 de marzo del 2023.
La comunidad ultraortodoxa, y en menor medida, la comunidad nacionalista religiosa, administran sistemas escolares separados que ofrecen una educación mediocre con poco respeto por los valores democráticos como los derechos de las minorías, dijo Ben-David.
Debido a que estas comunidades tienen altas tasas de natalidad, dijo que el país necesita volver a un modelo de ¨crisol¨ que incluya un plan de estudios básico promoviendo valores universales, dijo. ¨Si somos una nación, entonces necesitamos enseñar a nuestros hijos lo que nos une¨.
Danny Danon, un ex embajador para las Naciones Unidas y una figura principal del partido Likud de Netanyahu, dijo que el aniversario es un tiempo para que todos reflexionemos y pensemos sobre lo que tenemos en común.
¨En mis cinco años en la ONU, me di cuenta, que, nuestros enemigos no hacen distinción entre izquierda y derecha, secular y ortodoxo¨, dijo. ¨Es por eso que tenemos que darnos cuenta de que debemos mantenernos unidos¨.
Y, por supuesto, muchos ven las celebraciones del 75to aniversario como un momento para la alegría.
Pinhasov dijo que organizará una fiesta para unas 100 personas en su casa en el centro de Israel, muchos de ellos miembros de la familia de su esposo.
¨Es nuestro Día de la Independencia¨, dijo. ¨Todavía es un día para celebraciones¨.
El personal de Times of Israel contribuyó con este reportaje.
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Times of Israel
