20 Mar Una última súplica desesperada y con poca posibilidad de éxito: Primer ministro Netanyahu, detenga esta locura
El primer ministro Benjamin Netanyahu, preside una reunión de gabinete sobre el presupuesto estatal, en la Oficina del Primer Ministro en Jerusalem, 12 de marzo del 2023.
¿Su coalición se fracturará si abandona la revolución judicial? Maravilloso. Desconéctese de los extremistas, afirme su sionismo y revierta el asombroso daño que está infligiendo.
Por: David Horowitz
Esta Nota del Editor se envió el miércoles temprano en el correo electrónico de actualización semanal de ToI a los miembros de la Comunidad de Times of Israel. Para recibir las Notas del Editor cuando son publicadas, únase a la Comunidad ToI aquí.
Estimado Primer Ministro Benjamin Netanyahu, esta es una súplica -una última, con poca probabilidad de éxito y desesperada apelación a su sionismo, a su preocupación por su lugar en la historia, a su conciencia: Detenga esta locura.
Estamos a dos semanas de la fecha límite que su propio gobierno estableció para la promulgación de la revolucionaria legislación que usted puso en marcha, que nombró un ministro de justicia y un presidente de comité para avanzarla, que construyó una coalición para que votara por la ley y que defiende casi diaria y absurdamente como un fortalecimiento de nuestra democracia -legislación que, de hecho, hará añicos los principios fundamentales de Israel, afirmados con orgullo en la Declaración de Independencia, como un estado judío tolerante y democrático comprometido con la igualdad y las libertades personales.
Si no presta atención al llamado del presidente Isaac Herzog para desechar un paquete de leyes que neutraliza a la Corte Suprema, el único organismo capaz de defender todos y cada uno de los derechos básicos para que no sean pisoteados por su coalición debidamente elegida, marcaremos la fiesta de la libertad de Pesaj de este año como una nación con sus libertades fundamentales ya no protegidas de la tiranía de su mayoría.
No existe una explicación aceptable para el camino que ha elegido seguir desde que fue electo en noviembre, su traición de su promesa de ¨ser un primer ministro para todos -para aquellos que votaron por mí, y para aquellos que no votaron por mí¨.
Usted sabe que este país no se puede sostener si no es democrático. Algunos de sus mejores cerebros no se quedarán aquí. La economía se hundirá. Muchos contribuyentes no tolerarán una carga cada vez más discriminatoria en la que, entre otras cosas, están subsidiando un sector ortodoxo de rápido crecimiento que, bajo los acuerdos de su coalición, estará exento por ley de realizar el servicio militar o nacional y educado en gran parte, sin las habilidades básicas para contribuir a la fuerza de trabajo, sus hombres jóvenes financieramente incentivados a estudiar Torah a tiempo completo.
Y, quizás más alarmantemente, sabe que muchos ciudadanos no enviarán a sus hijos a servir en el ejército de un Israel que no es un estado judío democrático.
La combinación de la revolución judicial y las políticas que se están desarrollando y se desarrollarán una vez que la corte haya sido marginalizada -los planes para la discriminación legalizada, para la anexión del territorio de Judea y Samaria y la expansión generalizada de los asentamientos, para el ataque al judaísmo no ortodoxo, et al -están destruyendo sus propios objetivos declarados como primer ministro. Las relaciones con Estados Unidos, cruciales si Israel quiere enfrentar la amenaza existencial de un Irán nuclear, se están desgastando. Los judíos de la Diáspora, a quienes desea representar y quienes quieren mirar a Israel como una fuente de orgullo, como un hogar potencial y, en algunos casos, como un refugio esencial, están en ebullición por la amenaza a la democracia, la amenaza al cambio de la Ley de Retorno, la amenaza al pluralismo religioso. La inversión en la economía impulsada por la tecnología que usted ayudó a nutrir y sabe que Israel debe mantener está en riesgo, ya que la confianza en el extranjero en el estado de derecho y la estabilidad de Israel disminuye. Sus propios planes declarados a menudo de ampliar el círculo de la paz regional, notablemente para incluir a Arabia Saudita, se están evaporando a medida que el conflicto palestino escala, y las sociedades existentes se están erosionando. El presidente Biden ni siquiera lo invitará a visitarlo; ni tampoco, lo harán los líderes de los Emiratos Árabes Unidos.
Algunos dicen que usted desató esta revolución para evadir su juicio. Eso no tiene sentido. Podría prolongarlo durante años o subvertirlo con iniciativas legislativas menos drásticas.
Otros postulan que está intimidado por los extremistas -aquellos que ha empoderado políticamente, y los tóxicos comentaristas de televisión, radio y redes sociales, incluidos algunos muy cera de casa.
Escuché que algunas personas que lo conocen bien piensan que se ha convencido a si mismo de que es el verdadero Rey Bibi, una figura nacional grandiosa e histórica, más sabio y más capaz que todos.
Si es así, su dominio está lejos de ser absoluto -sus manos no están, como prometió en entrevistas en Estados Unidos posteriores a las elecciones, ¨en el timón¨.
El ministro de finanza, Bezalel Smotrich, (foto superior, centro) posa con miembros de Israel Bonds en su conferencia en Washington, el 12 de marzo del 2023, mientras manifestantes a favor de Israel (foto inferior) protestan afuera del hotel.
No tenía una alternativa política para la coalición de derecha, los aliados de la ultraderecha supremacista judía y los ultraortodoxos no sionista que reunió. Pero ellos tampoco.
Y, sin embargo, eligió hacer a Bezalel Smotrich la segunda figura más poderosa en su gobierno, envalentonado desde su posición conjunta como ministro de finanza y ministro de defensa para pedir hace dos semanas al Estado de Israel que ¨aniquile¨ al pueblo palestino de Huwara después de que dos israelíes fueron asesinados ahí en un ataque terrorista. Usted sabía los peligros planteados por la agenda teocrática de Smotrich, su opinión intolerante sobre los árabes, su hostilidad a corrientes no ortodoxas del judaísmo y más Y, predeciblemente, todo lo que tomó fue algunos comentarios breves y considerados -tres días después del ataque terrorista, y luego retroceder, para causar un daño inestimable a las frágiles relaciones en la región, a las relaciones con la judería de la Diáspora, a nuestra posición con Estados Unidos y otros aliados internacionales, al propio sentido de identidad de Israel y, devastadoramente, a la unidad y cohesión del ejército del pueblo.
Al destruir la independencia, credibilidad y capacidad de nuestra propia Corte Suprema para investigar presuntos delitos cometidos por las FDI, su reforma judicial ya amenaza con eliminar la protección vital de nuestros soldados del enjuiciamiento internacional. Cuando un ministro dominante en su gobierno luego insta públicamente al estado a aniquilar a toda una ciudad, inevitablemente los pilotos que rutinariamente arriesgan sus vidas en la defensa de este país, sienten náuseas por la perspectiva de recibir tal instrucción, comprensiblemente se reúnen para recordar al jefe de la fuerza aérea que no llevarán a cabo órdenes patentemente ilegales, y comienzan a preocuparse profundamente sobre sus papeles en el brazo militar de un gobierno así. Como escuchó al jefe de estado mayor, Herzi Halevi, declarar públicamente la semana pasada: La capacidad misma del ejército para funcionar ¨depende de la preservación de las FDI como el ejército del pueblo en un estado judío democrático¨.
El jefe de estado mayor de las FDI, Herzi Halevi, habla en una ceremonia militar para tropas reservistas en la Universidad de Tel Aviv, 12 de marzo del 2023.
Y por eso le suplico, primer ministro, deje de decir tonterías falsas sobre el fortalecimiento de la democracia, deje de denigrar a los lideres de la oposición y a los manifestantes como anarquistas y peor, deje el incitamiento contra aquellos que expresan su creciente y sincera preocupación por el país que aman -los reservistas, y los economistas, y los juristas, y los académicos, y, sí, los medios de comunicación. Desconéctese de los extremistas. Preste atención a las voces de los que ha confiado hasta ahora -sus propios jefes bancarios y asesores legales presentes y pasados; sus propias personas designadas al mando de nuestros servicios de seguridad; los expertos judiciales internacionales y sionistas del calibre de Irwin Cotler y Alan Dershowitz; Miriam Adelson, por el amor de D-s.
Detenga esta locura.
No simplemente detenga la embestida legislativa actual. Preste atención al presidente y abandónela. Y anuncie la iniciación de un proceso consultivo sin plazo para la reforma judicial. Demonios, ir a por todas.: Trabaje para una constitución, con la Declaración de Independencia como al menos un modelo parcial.
Sí, su coalición se fracturará. Acelere el día.
¿Quién sabe? Benny Gantz y suficientes otros podrían ir a rescatarlo. O no.
Pero comenzará a revertir el daño asombroso que ha infligido en Israel en las pocas semanas de su atroz coalición, 50 (¡) de cuyos ministros y legisladores el martes exigieron que el ministro de defensa liberara de la detención administrativa a los dos colonos extremistas detenidos por su presunta participación en el alboroto de vigilantes en Huwara.
Habrá comenzado a sacarnos del abismo, para salvaguardar a este Israel que simplemente debe continuar cumpliendo su propósito central como la patria nacional de los judíos, como un faro democrático completamente capaz de defenderse, y que sólo puede hacerlo en algo cercano a la armonía interna.
Y nosotros, los israelitas, todavía seremos un pueblo libre este Pesaj.
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Times of Israel