16 Mar Herzog presenta su propuesta para una reforma judicial
El presidente israelí Yitzhak Herzog presentó este miércoles su propuesta para una reforma judicial, que llamó “el anteproyecto del pueblo”, instando al gobierno y a la oposición a su análisis y a tomar un compromiso al respecto.
La propuesta de Herzog incluye, entre otras cosas, candados en la Knéset respecto a la promulgación de Leyes Básicas, evitar que el gobierno controle el organismo que elige a los jueces de Israel, así como delinear limites en cuanto a las capacidades de la Corte Suprema para anular leyes.
En cuanto al Comité de Selección Judicial, los jueces en el panel ya no podrían vetar a los candidatos como lo hacen hoy. Sin embargo, el gobierno tampoco disfrutaría de la mayoría automática. El órgano estaría compuesto por 4 miembros del gobierno, 2 miembros de la oposición, 3 jueces y 2 representantes públicos designados por el ministro de Justicia en acuerdo con el presidente de la Corte Suprema. Se requeriría una mayoría de 7 de 11 miembros para confirmar un nombramiento.
Los cambios a las Leyes Básicas requerirían 4 lecturas en el pleno de la Knéset y la cuarta requerirá una mayoría de 80 votos a favor. Cualquier cambio a las leyes electorales requeriría 80 diputados en las cuatro lecturas. Se reafirmarían las Leyes Básicas existentes. Una vez aprobadas, la Corte Suprema no podría revisar las Leyes Básicas.
Los derechos a la igualdad, la libertad de expresión y la manifestación se establecerían en Leyes Básicas.
Al revisar las leyes ordinarias, la Corte Suprema se reuniría con 11 jueces, y se necesitarán 8 jueces para anular una ley. La Corte Suprema no podría anular los nombramientos ministeriales o las decisiones de política gubernamental basándonse en el principio de razonabilidad. Sin embargo, la cláusula todavía se podría utilizar al revisar las acciones de las autoridades públicas.
Los asesores legales del gobierno no se convertirían en nombramientos personales. Sin embargo, un ministro tendría derecho a reemplazar a su asesor legal en base a desacuerdos significativos en curso que perjudiquen su capacidad para trabajar juntos. La posición de un asesor legal seguiría obligando al gobierno.
Herzog aseguró que su propuesta busca preservar la democracia en Israel conteniendo en ella las ideas en común tanto de defensores como opositores de la reforma judicial del gobierno.
Asimismo, advirtió de la situación e la que actualmente se encuentra la sociedad del país ante la polarización por la reforma judicial.
“Quien crea que una guerra civil es algo a lo que nunca podremos llegar, la verdad es que no tiene idea de lo que habla”, advirtió el jefe de Estado israelí.
“Las últimas semanas nos está destrozando, se ha dañado la economía, la seguridad, la sociedad, los lazos políticos y especialmente la cohesión israelí“, lamentó.
“El esquema responde a la importante necesidad de diversificar el sistema judicial para que, entre otras cosas, las múltiples voces del pueblo de Israel se sientan parte de él y lo vean como su hogar; y obliga al sistema judicial para hacer los cambios necesarios cuyo momento ha llegado.
“El esquema propuesto ancla una relación digna y equilibrada entre los poderes del Estado, que permite que cada poder cumpla su función y opere dentro de los límites de su jurisdicción sin interferencias excepcionales de otro poder.
“El esquema está totalmente comprometido con los principios de la Declaración de Independencia; fortalece la independencia del sistema judicial; y establece un sistema de derechos humanos y ciudadanos, tanto para hombres como para mujeres, incluidas las minorías en Israel”, aseguró Herzog.
De acuerdo con Ynet, la propuesta fue formulada por parte de Herzog, sin la participación ni del gobierno ni de la oposición.
Con esta propuesta, Herzog esperaría que se reemplacen las actuales iniciativas de ley de la reforma judicial que ya se encuentran en su proceso legislativo en la Knéset.
Herzog ha sostenido a lo largo de las últimas semanas múltiples reuniones de larga duración con figuras políticas, de la ciudadanía y del Poder Judicial, que han incluido tanto a opositores como a aquellos que apoyan la reforma judicial.
Fuente: Enlace Judío