08 Sep Cómo sabía el Rebbe Lubavitcher que Gorbachov liberaría a Rusia – Opinión
POR: David Eliezrie
Son colocadas rosas en una escultura de Mikhail Gorbachov en memoria del líder final de la Unión Soviética, en el memorial ´Padres de la Unidad´ en Berlín, el miércoles.
El jefe de la Unión Soviética, Mikhal Gorvachov, dio el paso para abrir la Cortina de Hierro a la inmigración y permitir que los judíos practicaran el judaísmo.
En abril de 1985, el Prof. Yirmiyahu Branover, uno de los más conocidos refuseniks [N.T. judíos a los que se les negaba el permiso para emigrar] soviéticos, estaba en un viaje a New York desde Israel, donde había estado enseñando en la Universidad Ben-Gurion del Negev en Beersheba.
Un jasídico devoto de Jabad, había creado Shamir, una organización de divulgación para los inmigrantes judíos a Israel destinada a ayudarlos a aprender sobre su patrimonio judío después de haber estado prohibido hasta entonces.
Branover se sorprendió cuando el secretario del Rebbe Lubavitcher, el rabino Menachem Mendel Schneerson, lo llamó y le dijo que el Rebbe quería verlo. Esto era muy inusual ya que el Rebbe había cesado sus reuniones privadas en el momento. Fue, y el Rebbe le dio un importante mensaje: ¨Contacta a los activistas en Rusia y diles que pronto se les permitirá practicar su religión libremente y emigrar, si lo eligen¨. El Rebbe le pidió que mantuviera esta información fuera de los medios de comunicación.
Branover estaba en shock ante esta predicción aparentemente poco realista, pero inmediatamente, al dejar la oficina del Rebbe, comenzó a contactar a los judíos de Rusia para compartir el mensaje del Rebbe. La reacción fue de incredulidad. Una persona le dijo a Branover, ¨¡Estamos bajo la vigilancia de la KGB mientras hablamos!¨ Branover informó de la reacción de los judíos rusos al Rebbe, quien respondió escribiéndole una nota que decía: ¨Los cambios ya están en marcha, pero aún no son evidentes¨.
Unos pocos años después, el recién electo jefe de la Unión Soviética, Mikhail Gorbachov dio el paso sin precedentes de abrir la Cortina de Hierro a la inmigración y permitir que los judíos practicaran el judaísmo como desearan.
El Rebbe Lubavitcher.
En junio de 1992, después de que Gorbachov había dejado su cargo como líder de Rusia, fue invitado para recibir un título honorario en la UBG, y al Prof. Branover se le pidió que escoltara a Gorbachov durante su visita. Mientras recorrían el campus universitario, Branover le contó a Gorbachov la historia de lo que había ocurrido en 1985, cuando el Rebbe le dijo que informara a los judíos de Rusia que el cambio estaba en marcha.
Gorbachov estaban tan asombrado, diciéndolo a Branover, ¨No puede ser posible. Cuando asumí el cargo en 1985, no tenía intención de liberar a Rusia. De hecho, mis planes eran lo opuesto. La idea de glasnot [N.T. apertura y transparencia] era solamente para el consumo exterior, para eliminar la presión de Occidente. No tenía planes de permitir la inmigración judía entonces. Sólo más tarde cambié de opinión¨.
Cuando Gorbachov visitó la Universidad de Oxford en una fecha posterior, tuvo una conversación similar con Peter Kalms, copresidente de Shamir y un confidente cercano de Branover. Gorbachov le reiteró a Kalms que no tenía planes de liberar a los judíos soviéticos cuando asumió el poder y preguntó, ¨¿Cómo lo supo el Rebbe si ni yo mismo lo sabía¨.
¿Cómo sabía el Rebbe Lubavitcher que Gorbachov liberaría a los judíos soviéticos?
Muchos creen que la decisión de Gorbachov de permitir la emigración de los judíos soviéticos fue el resultado de una manifestación masiva organizada en Washington en 1987. En el momento, había habido un debate por largo tiempo sobre la mejor manera de presionar al gobierno ruso para que cambiara su política hacia la judería rusa. Muchos activistas, cuyas intenciones eran nobles, veían el asunto desde la perspectiva de una democracia como la de Estados Unidos, afirmando que las manifestaciones públicas eran la mejor manera de presionar a la Unión Soviética.
El gobierno israelí apoyó, y de muchas maneras organizó secretamente, aquellas manifestaciones. Esto fue hecho por la Oficina de Enlace (Lishkat Hakesher), una división de la Oficina del Primer Ministro desde principios de los años 1950. Había coordinado las actividades clandestinas del gobierno israelí en la Unión Soviética bajo la dirección del legendario espía maestro, Shaul Avigur. El Rebbe Lubavitcher, si bien cooperaba con Avigur en muchos niveles, no estaba de acuerdo con la manifestación pública. El Rebbe argumentaba que esto sólo causaría que los rusos se mantuvieran más firmes, y un sendero más exitoso era perseguir la defensa silenciosa y la diplomacia detrás de escena.
Él lo sabría. Desde New York, el Rebbe estaba liderando una red clandestina de instituciones judías en la Unión Soviética y apoyando secretamente a los judíos rusos con sus necesidades espirituales y materiales. Cuando el gobierno israelí decidió acercarse a los judíos rusos en los años 50´s, recordó el primer ministro Yitzhak Shamir en un memorial en 1994 para el Rebbe, el Mossad descubrió que la red estaba activa en todas las ciudades.
En 1969, el Rebbe solicitó al gobierno israelí que pospusiera una importante manifestación planeada para antes de Pesaj. Creía que causaría que los rusos tomaran represalias y prohibirían la emigración de un grupo listo ya para abandonar Rusia en el momento. Al principio, el gobierno bajo el primer ministro Levi Eshkol consideró la petición del Rebbe, pero cuando murió en febrero, su sucesora, Golda Meir, se negó. De hecho, a continuación de la manifestación, el permiso para un grupo grande de judíos para dejar el país fue rescindida.
El Rebbe claramente tenía una visión que superaba el consenso general e incluso una opinión experta en lo que se refería a la Unión Soviética. Sin embargo, la pregunta permanece. ¿Qué motivó a Gorbachov a derribar la Cortina de Hierro?
Gorbachov explicó sus motivaciones en dos ocasiones. En 1992, en una reunión privada con el rabino en jefe de Rusia, Berel Lazar, Gorbachov le dijo que las manifestaciones no tenían nada que ver con su decisión. La segunda ocasión fue a Nehemia Levanon, un agente israelí en Rusia durante los años cincuenta, quien más tarde coordinó las actividades de la Oficina de Enlace en Estados Unidos. Él escribió en sus memorias que también se reunió con Gorbachov después de que dejó el cargo, y el ex presidente le había dicho que el omnipresente antisemitismo en Rusia lo había llevado a permitir la inmigración.
Hoy en día, la vida y las oportunidades judías en la ex Unión Soviética están floreciendo mucho más allá de lo que cualquiera pudiera haber imaginado en 1985 y a raíz de su fallecimiento, los judíos de todo el mundo tienen una gran deuda de gratitud con el presidente Mikhail Gorbachov. Levantó las restricciones sobre la emigración judía rusa y permitió que los judíos que permanecieron en la ex Unión Soviética salieran de las sombras y practicaran su religión libremente.
El escritor, un rabino, es un shliach de Jabad en California, autor del próximo libro, Indomable– La Vida del Rabino Yosef Yitzchak Schneerson, El Sexto Rebbe Lubavitcher. Su email es rabbi@ocjewish.com
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post