09 May Bar Kokhba: Cuando el liderazgo (Rabínico) fracasa
En el 130-131 de la Era Común, Adriano, emperador de Roma por más de una década ya, viajó al oriente -uno de los muchos viajes que hizo alrededor de su imperio. Pensaba que sería una buena idea invertir para reconstruir Jerusalem, la cual había sido destruida 60 años antes: podría ser una vez más una gran ciudad, una joya en el imperio romano. Puede que haya considerado permitir a los judíos reconstruir su templo, pero en cualquier caso eso no estaba en los planes finales. Esos sí incluían un templo a Júpiter. La ciudad reconstruida, que sería un hogar para los judíos y los romanos, sería llamada Aelia Capitolina -Aelia por Adriano mismo, cuyo nombre de familia era Aelius, y Capitolina por el dios Júpiter, para quien sería construido el templo.
Los judíos fueron menos agradecidos de lo que Adriano podría haber esperado. Después de un año de planificación, incluyendo la excavación y construcción de cientos de complejos de túneles subterráneos a través de la tierra de Judea, los judíos se revelaron.
Ellos estaban liderados por un hombre llamado Shimon bar Koseba, junto con un sacerdote llamado Elazar. Nosotros sabemos casi nada sobre estos hombres -de dónde vinieron, cómo llegaron al liderazgo, qué hicieron antes del año 132. El nombre de Elazar se conoce solamente a través de monedas. El nombre de Bar Koseba -su nombre real -lo conocemos solamente por las cartas que él escribió, las cuales fueron encontradas a mediados del siglo XX.
La entrada a una de los cientos de redes de cuevas subterráneas utilizadas en la revuelta liderada por Bar Koseba
Con los descubrimientos de las cartas, sabemos algo sobre el hombre. También sabemos algo de su administración, y de la gente involucrada en la revuelta -al menos de aquellos que huyeron a las cuevas en el desierto de Judea, documentos en mano, y que resperaban que la amenaza romana se disiparía y ellos podrían regresar a sus hogares. Quizás la más interesante es una mujer llamada Babatha, originalmente del otro lado del Mar Muerto, quien llegó a una cueva junto con algunos de los guerreros de Bar Koseba, llevando su ketubah y otros documentos legales. De estos obtenemos un sentido de su vida -y la de la gente apoyando a Bar Koseba.
El nombre de Shimon Bar Koseba, del inicio de una carta dictada por él
Sin embargo, ninguna de estas personas en las cuevas escapó. Una funda de cráneos fue encontrada en la cueva, también. A la larga, los romanos siempre ganan.
Un texto del archivo de Babatha, una mujer atrapada en la revuelta de Bar Koseba, quien murió en una cueva en el desierto de Judea
De acuerdo a un texto posterior, el mismo Rabi Akiva aclamó a Bar Koseba como el mesías. Sin duda así fue cómo él recibió el nombre de Bar Kokhba “Hijo de una Estrella”. Pero él fue, como mucho, un mesías fracasado. Los resultados de su revuelta fueron catastróficos. Un escritor romano pone el número de judíos muertos en 580,000.
Jerusalem fue destruida una vez más, más completamente esta vez. Los judíos fueron expulsados. Adriano nunca perdonó a los judíos, y las historias de mártires proliferaron. Los intelectuales de todo el imperio romano castigaron a los judíos, condenándolos como ingratos (y mucho peor) por no apreciar la estabilidad e ilustración traídas por el gobierno romano.
Los estudiantes de Rabi Akiva, los Tannaim, nos dejaron una gran cantidad de textos -la Mishnah, la Tosefta, los midrashim halájicos. Qué tienen ellos que decir sobre este episodio? Nada en lo absoluto. Él nunca es mencionado en ninguno de los trabajos de los Tannaim. Ningún texto judío por el próximo siglo o más, menciona su nombre.
Por qué? Creo que no es difícil discernir la razón. Qué puede ser dicho? No hay nada positivo que decir, ciertamente no para aquellos viviendo en las secuelas de la devastación. Los Tannaim en su mayor parte vivían en la Galilea, habiendo sido desterrados de Judea o alejados de ahí después de la catastrófica revuelta. Pero ellos tampoco tenían nada negativo que decir. Cómo podían ellos? Criticar a Bar Koseba sería criticar a Rabi Akiva, admitir que ese gran erudito y maestro, el maestro intelectual de casi todos los Tannaim, y la mente detrás de la Mishnah, se equivocó en el más importante de los asuntos mundanos. Sería admitir que siendo el gran rabino erudito, como lo era, el juicio de Rabi Akiva llevó a la muerte de cientos de miles de judíos. Mejor permanecer en silencio.
Una bolsa de cráneos encontrada en una cueva donde los guerreros de Bar Koseba y otros se habían escondido
Vale la pena comparar esto con las reacciones al Holocausto. Dejando a un lado la cuestión de la participación de D-s, qué pasa con los rabinos? Que pasa con los muchos grandes rabinos eruditos que abogaron por permanecer en Europa, en lugar de la América asimilacionista o -el Cielo no lo permita! -el asentamiento sionista en Palestina? Qué decir sobre los rabinos que pudieron, si ellos hubieran ofrecido consejos diferentes, quizás haber salvado las vidas de miles de sus seguidores?
Los senderos divergen: mientras los Tannaim permanecieron silenciosos, los pensadores ultra-ortodoxos del siglo XX ofrecieron una multitud de trabajos. Fue culpa de los sionistas; fue el diablo mismo; las tendencias asimilacionistas tenían que ser castigadas; los más preciosos judíos fueron sacrificados por D-s; y así. Es mejor hablar o permanecer en silencio? Norman Lamm escribió que uno no puede permanecer en silencio a la luz del Holocausto, pero uno tampoco puede decir nada.
Los judíos han luchado con la imagen de Bar Koseba por casi 1,900 años. Un líder rebelde y un mesías fracasado, se convirtió en un héroe sionista en el siglo XIX, y ahora es el protagonista de las celebraciones de Lag b-Omer. Arcos, flechas y hogueras muestran la rehabilitación de un hombre cuyos orígenes están perdidos en la historia, y cuya desafortunada revuelta cambió la sociedad judía.
El mini-curso de Aaron Koller, “Bar Kokhba: Rebelde, Fracaso, Héroe” tendrá lugar en el Instituto Drisha para la Educación Judía, el martes 9, 16 y 23 de mayo. Para más información, ver http://drisha.org/product/bar-kokhba-rebel-failure-hero.
Fuente: The Times of Israel
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil